Nunca se quien lee este blog. Siempre dije que fue una escapatoria de dos personas para escribir lo que les apetecía (una especie de desahogo) sin importarles la cantidad de lectores, simplemente, una forma de ayudar al público a conocer más y mejor música. Odio hacer los post personalistas pero hoy hago una excepción. Aprovechando esta coyuntura y si os gusta como se escribe aquí, os animo a que votéis la crónica de El Día de la Música. El registro es fácil, solo lleva cinco minutos, y votando el texto (a nombre de danigarcia10) podríais ayudar a este firmante a conseguir una acreditación de prensa para el FIB. Gracias a todos.
Este es el link: http://musica.heineken.es/fibHeineken09/
Esta es la crónica:
EL NUEVO CREDO FESTIVALERO
El sexteto mostró la artillería pesada desde un primer momento: Rey Sol, Un día en el mundo y Copenhague se dejaron sonar en los primeros instantes para cerrar con Sálvese quien pueda. Corta actuación pero correcta con “El Indio” y Jorge dejando alguna perla percusionista; sin embargo la voz de Pucho fue tapada por una manta de coros de quinceañeras recitando de carrerilla las letras de los de Tres Cantos, cual concierto de los Jonas Brothers.
Finiquitada la actuación de los madrileños fue turno para el obligado cover con Christina Rosenvinge, uno de los doce temas versionados por bandas de la escena nacional del CD especial para esta ocasión. Chicago de Sufjan Stevens fue la elegida y denotó una notable ‘verdosidad’. No fue el único, pues alguno de los covers escuchados durante el día desprendieron falta de rodaje como el caso de Cuchillo y Klaus & Kinski (con Let’s make love and listen to death from above de CSS).
Catpeople estrenó el Escenario RNE3 bajo un sol de justicia. Oscuros y seductores al unísono, facturaron una sobresaliente actuación pese tener al calor como enemigo, donde se escucharon algunas de sus piezas de estética ‘interpoliana’ como Radio. El dios Ra ecijano convocó al sol para la sobremesa y El Matadero se convirtió en una sartén solo aliviada por los humidificadores instalados por la organización y las recatadas sombras. Heineken (con su bagaje festivalero) y El Matadero dieron muestra de una sinergia absoluta sorprendiendo a propios y extraños por la magnitud del festival que confeccionaron el pasado domingo, superando con creces a la pasada edición. En esta coyuntura calorina, Underwater Tea Party destapó una sorpresa, un vistoso cover de Electric Feel de MGMT. En el lado negativo, Cuchillo apareció tocando la campana de las cinco desganados por las condiciones atmosféricas. Entonaron tres canciones y desaparecieron, dejando a la audiencia con ganas de acceder a sus inframundos sonoros adimensionales.